miércoles, 23 de septiembre de 2009

La primera hora de la mañana

Te veo allí inmóvil en esa primera hora de la mañana, invitándome a acercarme a aliviar el estremecimiento que tengo en la piel al verte. Imposible resistirme, voy hacia ti perdida en el impulso de poseerte, de sentir tu olor, de fundirme con tu aroma y perder la noción del tiempo. Cierro los ojos, te siento en mis labios, reconociendo tu sabor, extrañando tu breve contacto cuando aún lo tengo como si fuera la primera vez que te tengo y la última que te poseo. Te separo de mí, casi con brusquedad sintiendo en mi cuerpo el rastro de tu presencia, sólo para saber que te necesito urgentemente y no puedo estar sin ti.


Finalmente me doy por vencida y me entrego al maravilloso acto de placer matutino de tomar la primera taza de café del día.

Hoy la única receta a compartir es que el mejor café del mundo es el que se toma en una excelente compañía.

viernes, 11 de septiembre de 2009

Alegrías Amargas

Hace un tiempo en un programa de televisión pasaron un ejercicio emocional muy curioso, un hombre le dio a una mujer que había perdido un bebé un globo… un gran y hermoso globo de color rojo… él le dijo este globo representa las ilusiones, los pensamientos y sueños sobre tu bebé… él se ha ido y tú debes dejarlo ir… en el programa ella lloró durante un periodo menor al tiempo de televisión entre las interminables pausas de anuncios y soltó el globo.

Muchas semanas después en mi camino de regreso a casa ví a un globero, en una de las orillas había un hermoso globo rojo y recordé el programa… instintivamente orillé el auto y pagué por ese globo…
Todos tenemos pérdidas dentro de nosotros, difíciles de desprender, de soltar... durante el resto del camino pensé en esa pérdida que tengo amarrada y me decidí a soltarla… llegué a casa y pensé que la tarde era la mejor hora para desprenderme de ella… me vestí expresamente para ello, tomé el globo y salí al jardín... pensé que sería sencillo pero no fue así mi mano se aferró al pequeño hilo que mantenía al globo preso… y aunque pensé en todas las buenas razones para dejarlo ir… no me atreví.

 No sabía cuán amarrado está todo eso en mi… no lo sabía hasta que ese globo dejó de serlo y se convirtió en el cúmulo de pensamientos, imágenes y rostros…

 Esa tarde acabé en la cocina una vez más haciendo alegrías con chocolate amargo, posponiendo dejar libre mi pérdida… el globo viéndome amarrado en el banco de la cocina… hice casi medio kilo de alegrías de chocolate amargo… duraron varios días comiendo un poco cada día mientras observaba al gran globo rojo descender un poco cada día hasta que un día simplemente no se volvió a elevar.

 Entonces entendí el ejercicio… mientras más tardes en soltar tus pérdidas, éstas dejarán de volar…

 Las alegrías amargas se hacen con
  • Chocolate amargo de repostería
  • Crema líquida (una cucharada por cada 250 gr de chocolate)
  • Amaranto Tostado
El chocolate y la crema se ponen juntos en baño maría hasta que se vuelven un líquido uniforme, en un recipiente de aluminio desechable se coloca amaranto y se derrama sobre él el chocolate presionando con una cuchara… se deja enfriar para que solidifique…

No he comprado ningún hermoso globo de nuevo… pero planeo hacerlo antes de tu cumpleaños.

Rincón de Frases

Cuando la pasión entra por las venas... la razón sale por los ojos...

Debes aprender a escoger las batallas que perderás y las guerras que quieres ganar.

No temas sentir que mueres al decir "Te amo", ten miedo de haber muerto sin decirlo.

A quien muerde la mano que le sostiene, pronto cae con el peso de su estupidez.

La memoria que perdemos es porque la llenamos con sabiduria. AVV

Los héroes en tiempo de paz mueren en el olvido.

El expresionismo nos permite ver la vida a través de un espejo de agua que filtra los detalles dejándonos únicamente los sentimientos.





Así como los artistas necesitan lienzos en blanco, los maestros requieren alumnos dispuestos a aprender.

Basta que algo nazca con la etiqueta de temporal para que nunca se vaya, mientras algo que se nombra como oficial y permanente no dure ni tres meses.

No hay verdad que se oculte con un traje de baño.

Si la presentación no importara nadie se casaría.

Cada noche sin amor es como una luna sin observar.

Las políticas están hechas para evitar el sentido común de la gente.

Siempre sé una persona que hace sentir bien a los demás cuando les llamas y evita hacer sentir inoportunos a los demás cuando te llaman.

Madurar a veces significa aprender a tener miedo.

viernes, 4 de septiembre de 2009

Chocolates decorativos

El sábado rompí la foto que nos tomamos unos días antes de la última navidad, una vez más abrí mi messenger y bloquee tu contacto, en el teléfono no aparece tu nombre sino la frase en mayúsculas “NI SE TE OCURRA CONTESTAR” a fin de que si me llamas recuerde que no debo contestar tu llamada; una vez más arranqué el número de tu teléfono del corcho de la cocina y guardé tu sweter en el baúl de la ropa olvidada. Saqué las canciones que me diste de mi mp3, quité el fondo de pantalla de mi lap…

Recorrí la casa en búsqueda de algo que me recordara tu presencia, pero en realidad no encontré nada que pudiera quitar y al mismo tiempo todo me hacía visualizarte… lloré tu ausencia mientras con los ojos cerrados buscaba tu mano…

Así estuve por un par de horas hasta que me sentí más tranquila… bajé por unos chocolates y regresé a mi cuarto, me tiré sobre la cama con una cinta adhesiva y me dediqué una vez más a reconstruir tu foto… al rato volveré a poner todo en su lugar… hasta la próxima vez que me empeñe en que debo olvidarte.

Los chocolates decorativos se hacen con chocolate de repostería y/o chocolate de colores que venden en tiendas de insumo, existen moldes de muy diversas formas pero lo más importante es que el chocolate se derrita lentamente en baño maría y que la primera capa de los moldes sea puesta con un pincel y se deje endurecer perfectamente antes de poner el relleno. Los chocolates se deben dejar endurecer a temperatura ambiente siempre.

martes, 1 de septiembre de 2009

Latte tipo Español

Una mañana de martes con todo un día de juntas en la oficina por delante, quizás más técnicas de lo que me gustarían o quizás yo más predispuesta hoy que de costumbre… la verdad es que desperté un poco mal humorada por haber dormido mal, por desear cambiar tantas cosas y no tener el tiempo, la fuerza o inclusive la influencia para hacerlo… hoy definitivamente no es un día para salir a la batalla sino más bien para permanecer quieta y meditar un poco antes de actuar… así que muy fuera de mi costumbre no esperé a ninguno de mis compañeros de barraca y decidí ir a mi café gourmet preferido por un gran café tamaño tinaco que mitigara mi mal humor matutino… un latte tipo español… eso fue lo que apareció en mi ticket una vez que Martin “el bar tender” insistió en que tomara algo diferente a lo que originalmente deseaba… pero como he dicho hoy no tenía ganas de discutir así que cedí ante mi siempre sabio bar tender quien parece a veces conocer mi estado de humor mejor que muchas de las personas con las que hablo a diario.

El primer sorbo me hizo confirmar que mi bar tender tiene algo de cantinero, brujo, sacerdote o médico un latte achocolatado y dulce me llevó directo a la sala de casa de mis tíos, a aquellas épocas en las que mis pies no alcanzaban el piso sentada en un gran sofá de la sala junto al aún más grande árbol de navidad que yo recuerde haber tocado. En un instante los reportes a los clientes, los conferences y las reuniones de trabajo desaparecieron dejando aflorar aquellos días de emoción, de cuentas regresivas, de cartas al gordito que nos traía los juguetes que queríamos y no la ropa que nuestras madres insistían que pidiéramos… días sin prisa como diría la canción de Luz… aquellos días en donde la navidad implicaba una reunión de más de 50 personas en una casa, mesas repletas de comida y postres, pilas de regalos manoseados y agitados ante el menor descuido de los primos mayores, risas, música y ruido fundidos en un canto ceremonial de mi niñez, primos por dondequiera, chocolates en el bolsillo traídos en secreto por tu tía a su sobrina favorita – aunque hay que mencionar que en los bolsillos de cada uno mis primos se derretía uno igual al mio-….el sonido de las ollas y Ninfa ahuyentando a quien quería tomar ventaja y degustar la cena antes de la hora estipulada.

Me pregunto cuando la navidad se transformó en lo que hoy es… el mes que se pagan deudas con el aguinaldo, donde hay que contar y recontar los días de vacaciones para ver como se parte uno con la chamacada de vacaciones, cuando la cuentas regresivas no tienen mucho que ver con fiestas y regalos… no lo sé… quizás se pierden durante la adolescencia después de la primera vez que te rompen el corazón… o quizás la primera vez que decides comprar a crédito o pensar más allá del momento en el que vives… no lo sé… pero extraño esos días…
Hoy debo agradecerle a Martin el brujo bartender transportarme a mi niñez durante un breve momento y recordarme que al final de mis días seguramente recordaré más el sabor al latte tipo español de la navidad que la estrategia para este año fiscal.

Latte tipo español

Es un latte achocolatado, simplísimo de hacer.
  • Una carga de expreso
  • Leche al vapor
  • Una cucharada de cocoa líquida
  • Dos gotas de vainilla


Se cubren las paredes de un vaso de latte con la cocoa líquida Se agrega la leche, la vainilla y el expreso con cuidado al final… Se recomienda muy caliente junto a un gran árbol de navidad.