jueves, 11 de febrero de 2010

La caída

¿Cómo había llegado a esta situación? Ese camión… me arrojó al vacío sin poder hacer nada… en un cerrar y abrir de ojos… no saldría de esta. Fueron apenas unos segundos pero eso bastaron para pensar en todo lo que dejé de hacer, caía por aquel barranco junto al cual tantas veces pasé y tantas veces admiré, el único sonido que hallaba era el del viento y el de los últimos latidos de mi corazón.


Quise cerrar los ojos, pero la gravedad no me lo permitía, mis manos se aferraban a un volante que no me llevaría a ningún lado mientras mi mente se sujetaba a los momentos importantes de mi vida. Ya no había nada que hacer, ya no importaba lo que tuve ni lo que ansié, se había acabado el tiempo… todo estaba perdido… no dije tantas cosas… finalmente todo quedó en silencio y dí un último respiro justo a tiempo para despertar sobresaltada en mi cama…

¡Volví a nacer! Desconozco porque tuve que pasar por ese sueño, pero no quiero dejar de decir lo que siento, no voy a dejar de hacer lo que quiero, no importa sin creen que estoy loca por hablar y decir que me importan, que los quiero, o por desear correr a abrazarlos por siempre… no quiero pensar que puedo caer de nuevo y arrepentirme de no haberlo hecho… de no haberlo hecho a tiempo.